En pocas semanas finalizará el invierno. En esta época el elemento agua es el predominante. Hay que depurar y preparar el organismo para la primavera. Los órganos asociados son los riñones y la vejiga por lo que hay que evitar en lo posible el alcohol, los elementos procesados (tienen alto contenido en sal) y beber mucha agua. De esta forma mantenemos limpio el cuerpo a punto para la nueva estación. Los ejercicios específicos para aliviar esta zona junto a la respiración nos han de ayudar a tener el cuerpo y la mente en equilibrio.
Las palabras y la música ayudan a entrar en ese estado de relajación. La mente igualmente da miles de vueltas y es difícil dejar los pensamientos fuera y concentrarse en el ahora. Pero hay que seguir para mantener el equilibrio.
Llevar la mirada al interior nos hace más conscientes de las necesidades. Sentir la vibración lleva a conseguir la paz y la calma de la vorágine diaria. Es el momento de conectar con todas las partes de nuestro cuerpo y alma. Ser conocedores y sentirnos vivos.
A reflexionar y esperar qué nos deparan los próximos días. Fuerza y ánimo
